Sigo igual. Igual de dejada, de despistada, de pasota… pero a veces cuando llevo un ritmo maravillosamente frenético me vuelvo egoísta.
Este tiempo que no habéis sabido de mí he estado viviendo una de mis mejores épocas. Todavía no tengo queja alguna de este sueño llamado erasmus. Seguro que os parecerá muy cursi y exagerado lo que acabo de decir, pero cuando durante una larga etapa te encuentras estresado y te parece ser una de las personas con las que la mala suerte se ceba, cualquier acto que te haga huir de la rutina te parece el paraíso. Y os aseguro que ha llegado un punto en el que soy tan rutinariamente feliz que me da miedo lo que pase después de esto.
En este tiempo que no habéis sabido de mí he aprendido a convivir con gente de todo el mundo (mención especial a mis compis guarretes asiáticos jeje), he empezado amistades y enemistades (mención especial a mis compatriotas). He descubierto que puedo hablar en inglés y en alemán y que la gente tiene la santa paciencia de descifrar mis mensajes. He mejorado mi efectiva criba a primera vista y he hecho cosas que pensé que nunca haría. Porque irse de fiesta sólo con chicos americanos, recorrerse medio estado sola en busca de un aeropuerto, beber 2 litros de cerveza a la vez que bailas encima de un banco o pasar el día con alguien que acabo de conocer no es algo que haría de normal. Pero parece ser que es lo que tiene el erasmus, que sale tu yo más primitivo.
En este tiempo que no habéis sabido de mí también ha habido tiempo para que una personita muy parecida a mí y mi conciencia de efecto retardado, me bajen los pies a la tierra. Me haga ver que hay vida más allá de esta historia y que la gente que estaba antes de todo esto, por la cual merecía la pena estar positiva y alegre todo el día, sigue allí. Y que entre esa gente esta Berti tan maravillosa y especial como siempre, E’qui riéndose allá donde vaya, Ángela con sus idas y venidas de olla, Ana divinamente atrapà y Rachel viviendo una aventura de la que ya nos contará. Y que con todas ellas he vivido momentos buenísimos.
Por eso os pido perdón, por haber tardado casi dos meses en darme cuenta. Sólo deciros que aunque esté en mi paranoia yupi no me olvido de vosotras. Sé que esto no puede seguir así siempre y, en realidad, no me importa, pues sé que no sólo tengo mi historia actual, sino también la historia que he vivido antes de ésta y espero continuar en mi vuelta.
Saludos desde el sur de Alemania.
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donç mira tú que bé! la xicona escrui i s'ha gloriat! molt bé Ireneta! :D
ResponderEliminariepaaa!! que me voy mañana, hasta el martes a Hamburgo. así que no actualizaré el lunes.
ResponderEliminarun beso feas! :D
Me ha alegrado mucho leer tu actualización Irene...t mereces lo q t está pasando (No actualicé el viernes...siempre se me olvida! Lo haré esta noche...aunq no me toque)
ResponderEliminarBESOS A TODAAS!!